Personajes de La dama en el espejo de Virginia Woolf

Personajes de La dama en el espejo de Virginia Woolf

Descripción de los personajes de «La dama en el espejo» de Virginia Woolf —parte del libro de historias cortas Una casa encantada y otros cuentos.

Este artículo acompaña el resumen de la historia.

Alerta de spoiler: este artículo revela partes del argumento del libro.

Personajes principales

Isabella Tyson

Isabella Tyson, la protagonista de «La dama del espejo», es una misteriosa mujer mayor que vive sola en una casa grande y ricamente decorada con un hermoso jardín. Aunque el interior de su casa se describe con detalle a lo largo de la historia, poco se revela sobre la propia protagonista. La historia afirma que Isabella es rica, que ha viajado mucho coleccionando objetos para su casa y que nunca se ha casado. El narrador, cuya relación con Isabella no está clara, se pasa el relato especulando sobre otros detalles de su vida, principalmente extrapolando lo que se ve en el espejo. En distintos momentos de la historia, el espejo revela información diferente sobre Isabella: los finos muebles y la decoración de su casa, su cuidadosa atención a las flores del jardín, las cartas que llegan a mitad de la narración y el aspecto de Isabella, que el narrador percibe como «viejo y anguloso, veteado y rayado». Sin embargo, a pesar de toda esta información, Isabella sigue siendo un misterio; por ejemplo, no está claro si su bonita casa y sus costosas posesiones le han traído la felicidad, si tiene amigos íntimos o si está de acuerdo con la dura valoración que hace el narrador de su aspecto. De este modo, Isabella subraya el tema de la historia de que la percepción y la realidad pueden variar mucho: aunque el narrador y el lector pueden ver el reflejo de Isabella en el espejo, este reflejo no revela mucho sobre el mundo interior de Isabella.

El narrador

Nunca se nombra al narrador y se desconoce su sexo y su relación con Isabella; de hecho, ni siquiera está del todo claro que sea humano, ya que nunca se le ve, nunca interactúa físicamente con la habitación e Isabella parece no fijarse en él cuando regresa del jardín. A pesar de esta falta de información, toda la historia se cuenta desde la perspectiva del narrador. El narrador se sienta en el salón de Isabella y la observa a ella y a su casa, tanto en el espejo como en su propia imaginación. Su opinión sobre Isabella es a veces respetuosa y casi reverente. Cuando el narrador observa los muebles de Isabella, por ejemplo, se la imagina viajando valientemente por los «rincones más recónditos del mundo» para coleccionar bellos objetos para su hogar. Otras veces, sin embargo, el narrador parece desdeñar a Isabella, y acaban llegando a la conclusión de que, a pesar de su riqueza material, «no tiene pensamientos» ni «amigos». No está claro cuál es la causa exacta de estos cambios de opinión, aunque es posible que estén relacionados con los propios sentimientos del narrador —odio o celos— acerca de la riqueza material de Isabella. Sea cual sea el origen de esta incoherencia, ayuda a subrayar el tema de que las apariencias no necesariamente cuentan toda la historia de quién es un personaje. Aunque el narrador se pasa toda la historia observando a Isabella y su casa, al final, sus observaciones pueden decir a los lectores más sobre el narrador que sobre la propia Isabella.

 

Portadas de Una casa encantada y otros cuentos

  • «Una casa encantada» ha sido publicado en el libro Una casa encantada y otros cuentos de Virginia Woolf por Rosetta Edu en una nueva traducción al español en tapa blanda y ebook así como en una versión bilingüe, igualmente en tapa blanda y ebook.
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